Por Héctor Trejo S. columnista de Radiografía Informativa.
Cuando alguien nos cuenta que un mapache intergaláctico aparece como héroe de las galaxias, riéndose de humanos y extraterrestres, se imagina uno un caos de cinta, sin embargo cuando esa película es una producción extraída de un comic y está pensada en un público mayormente adolescente e infantil, todo parece tener sentido.
Me refiero a “Guardianes de la galaxia”, un largometraje que si bien, no es dirigido por el cineasta con mayor pericia de los que actualmente figuran en Hollywood (James Gunn), si tiene detrás el aval y amparo de Marvel, lo cual es sinónimo de calidad, cuando menos técnica, aunque de ser honestos, tiene también una narrativa bien cuidada y llena de sobresaltos emocionales, elemento que le aporta mucha fuerza al filme.
En términos generales, la historia nos cuenta como en el espacio, Peter Quill, un piloto estadounidense de la Tierra, es perseguido, luego de robar un orbe codiciado por el villano Ronan. Con el fin de evadir Ronan, Quill se fuerza en una incómoda tregua con un grupo de inadaptados que incluyen Gamora, Rocket, Drax el Destructor, y Groot. Pero cuando Quill descubre el verdadero poder de la esfera y la amenaza que supone para el cosmos, él debe reunir a sus rivales para una última batalla por la galaxia.
Sí, el argumento raya en lo simple, pero lo que en realidad le aporta carne al filme son sus memorables personajes, empezando por el propio protagonista Peter Quill (Chris Pratt), quien con el aire de grandeza y coraje que adopta, se vuelve imponente; Gamora (Zoe Saldana) la chica sensual de la historia, con ese color de piel verde que nos hace recordar a personajes rudos y cursis; pero sobre todo, en lo particular, me llamó mucho la atención Rocket Raccoon (Bradley Cooper), un mapache genéticamente modificado, el alma del equipo, burlón, desordenado, agresivo y con un aire de bravucón.
En resumidas cuentas es un filme familiar, digamos que un tanto palomero, pero bastante entretenido, con una fotografía, que por cierto es bastante buena, a cargo de Ben Davis y que al final de cuentas cumple con todos los requisitos de una película veraniega. Por todo esto, seguro que va a tener una buena recaudación taquillera.
Sólo le recuerdo que la imaginación se disfruta más en la oscuridad del cine, así que no deje de asistir a su sala favorita. Para dudas, comentarios o sugerencias escríbame al correo electrónico [email protected] o ingrese al sitio web www.inter-medios.jimdo.com